En medio de las críticas y autocríticas que han surgido en la Nueva Mayoría por la responsabilidad que tendrían los partidos en los problemas que han presentado algunas designaciones del futuro gobierno, la Democracia Cristiana (DC) se reunirá la próxima semana para conformar su propia comisión revisora de antecedentes.
Al quedar aún más de 1.000 cargos que llenar a nivel de gobierno, dicen en la tienda, el apoyo del grupo será de importancia para los nuevos nombramientos. Ello, luego del traspié sufrido tras la frustrada nominación de la simpatizante de la falange, Claudia Peirano, quien renunció a la subsecretaria de Educación tras una semana de criticas por sus vínculos con un sostenedor de colegios particulares subvencionados y haberse manifestado en 2011 contra la gratuidad de la educación.
A ese caso se suma el del nombrado subsecretario de Agricultura, el DC Hugo Lara, cuestionado por enfrentar procesos por temas de carácter comercial. Además del radical, Miguel Moreno, (futuro subsecretario de Bienes Nacionales) acusado de “ofensas al pudor”.
Por su parte, el futuro subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, habría trabajado con representantes de los partidos, rechequeando los datos de las autoridades ya designadas.