El premio
Nobel de Economía en 2001, Joseph Stiglitz, anunció hoy que la comisión de la ONU encargada de definir
salidas a la crisis sugerirá que el 1% del valor de los paquetes de rescate de
los países ricos se otorgue a las naciones en desarrollo.
"La
comisión va a recomendar que al menos un 1% de los paquetes de rescate que
están aplicando los países industrializados se destine a los países en
desarrollo", aseguró Stiglitz durante su intervención en la sesión
especial del Consejo de Administración de la Organización
Internacional del Trabajo (OIT).
"El 1 %
del paquete estadounidense, de US$ 780.000 millones, es muy poco. Y repartido
entre todos los países pobres será aún muchos menos, pero es menos que nada",
agregó el economista.
Stiglitz
justificó su sugerencia con el argumento de que el mundo "no va a lograr
una recuperación de la economía si una gran parte de los países permanecen
débiles" y citó especialmente a los países en desarrollo, a los que llamó
"víctimas inocentes".
"No es
una cuestión humanitaria, ni social, es de simple autoprotección", matizó.
"La
ayuda a los países en desarrollo es imperativa", sentenció el economista
estadounidense, por lo que explicó que es necesario explorar una amplia
variedad de posibilidades innovadoras para ayudar financieramente a los países
menos industrializados.
Algo que
recogerá el informe de la comisión de expertos de la ONU, que Stiglitz preside, y
que deberá definir en profundidad cómo salir de la crisis y evitar otras en el
futuro.
El grupo de
expertos se reunió los pasados lunes y martes en Ginebra, y espera presentar un
informe preliminar en las próximas semanas, antes de la cumbre del G-20 en
Londres, el 2 de abril.
Precisamente,
el premio Nobel de Economía de 2001 criticó al G-20, y especialmente a Estados
Unidos, por incumplir sus promesas de evitar el proteccionismo.
"En el
plan de estímulo de Estados Unidos hay una mención al mensaje 'compra
americano', lo que es una clara quiebra con el espíritu de la reunión del
G-20".
Stiglitz,
de 66 años, se mostró muy pesimista con la situación actual, dado que aseguró
que "el sistema estará destruido por varios años", y que considera
que no se están aplicando las medidas necesarias para repararlo.