Las autoridades estadounidenses anunciaron hoy que iniciaron
una investigación sobre problemas en los frenos del Toyota Prius 2010, poco
después de que el fabricante japonés reconociera problemas con el diseño de sus
frenos.
Los problemas de los vehículos Toyota, que en las últimas semanas se ha visto
obligada a llamar a revisión millones de vehículos en Estados Unidos por varios
defectos, provocó que el secretario estadounidense de Transporte, Ray LaHood,
mantuviera anoche una conversación con el presidente de Toyota, Akio Toyoda.
Según un comunicado dado a conocer hoy por el departamento de Transporte,
durante la conversación, la automotriz aseguró a LaHood que "Toyota se toma
muy seriamente las preocupaciones sobre seguridad de Estados Unidos y coloca la
seguridad como la máxima prioridad de la compañía".
En tanto, la Agencia
Nacional para la
Seguridad en la
Carretera de Estados Unidos (NHTSA, por su sigla en inglés)
dijo que recibió 124 quejas de consumidores relacionadas con la pérdida
temporal de frenada sobre carreteras irregulares y que en cuatro casos el
problema pareció causar accidentes.
NHTSA dijo que está investigando alrededor de 37.000 Prius 2010, vendido por
Toyota en Estados Unidos.