Verizon, la segunda mayor empresa telefónica estadounidense por
capitalización bursátil, anunció hoy que en los nueve primeros meses de
2010 ganó US$ 1.092 millones (39 centavos por acción), un 74,6%
menos que en el mismo periodo del año anterior.
Sólo durante
el tercer trimestre del año el beneficio de la compañía cayó un 25,1%
hasta US$ 881 millones (31 centavos por acción), afectada entre
otros factores por un coste extraordinario que le supuso 25 centavos por
acción y que estaba relacionado con una cuestión relativa a las
pensiones de sus trabajadores.
Si no hubiera tenido que
incluir ese costo la firma podría haber anunciado hoy un beneficio
trimestral de 56 centavos por acción, lo que habría superado ligeramente
las previsiones de los analistas.
Esas cantidades son las
atribuibles exclusivamente a Verizon, ya que su negocio de telefonía
móvil lo comparte con la operadora británica Vodafone, por lo que sólo
puede computar un 55% de lo ganado en esa lucrativa área de actividad.
La facturación de la
compañía registró descensos en ambos periodos: en los nueve primeros
meses bajaron un 0,7%, hasta US$ 80.170 millones, y en el tercer trimestre
un 2,9%, hasta US$ 26.484 millones.