Hace un tiempo, se venía escuchando en los pasillos de Grupo Falabella que solo faltaba un paso para consolidar su repunte: alcanzar nuevamente el grado de inversión que el retailer había perdido.Y ese día llegó.
Con resultados al alza y una estructura financiera más sólida, la compañía volvió a situarse en la categoría de inversión, luego de que Fitch Ratings mejorara su calificación a BBB- con perspectiva estable.
Hace menos de dos años, el panorama era muy distinto. A fines de 2023, el retailer recibió un golpe cuando la misma agencia rebajó su nota desde “BBB-” a “BB+”, lo que en la práctica implicó perder el grado de inversión. Poco después, S&P Global Ratings siguió el mismo camino, reflejando el complejo momento financiero que atravesaba el holding.
En su reciente reporte, Fitch destacó los avances logrados por el grupo para mejorar su rentabilidad operacional y reducir sus niveles de endeudamiento, factores que explican el retorno al grado de inversión. Según la clasificadora, Falabella alcanzó un margen Ebitda de 15% en el primer semestre de 2025, impulsado por una mejora transversal de sus operaciones en los distintos países donde opera.
Esta mejora “responde a los esfuerzos sostenidos por fortalecer la posición financiera, optimizar operaciones y seguir generando valor para clientes, colaboradores, inversionistas y comunidades”.
Otro punto clave fue la reducción de la deuda. Al cierre del segundo trimestre, el ratio de deuda financiera neta sobre Ebitda se ubicó en 1,9 veces, muy por debajo de las 8,2 veces registradas en noviembre de 2023, cuando la empresa sufrió la rebaja.
Además, durante el segundo trimestre del año, el grupo reportó utilidades por US$ 390 millones, acumulando ganancias por US$ 596 millones al primer semestre, lo que representa un aumento de 221% frente al mismo período de 2024.
“Este cambio respalda el buen momento de Grupo Falabella y ratifica nuestra capacidad para seguir creciendo, la resiliencia de nuestro modelo de negocios y el compromiso de nuestros equipos en todos los países donde operamos. La mejora en la calificación responde a los esfuerzos sostenidos por fortalecer nuestra posición financiera, optimizar nuestras operaciones y seguir generando valor para nuestros clientes, colaboradores, inversionistas y comunidades. Seguiremos trabajando con responsabilidad y visión de largo plazo, buscando oportunidades en la región”, destacó el gerente general de la compañía, Alejandro González.
Por su parte, el CFO de Falabella, Juan Pablo Harrison, destacó que “esta rápida recuperación de la calificación reconoce que nuestra posición financiera es sólida y consistente en el tiempo, reflejando una gestión disciplinada, con un buen control de gastos, mejores niveles de generación de caja, además de una sólida estructura de capital”.