La compra de Banmedica por parte de Patria Investments y Linzor Capital vendría a dinamizar a un estancado mercado del capital privado en la región, paralizado tanto en transacciones como levantamiento de recursos.
Pero también revitaliza a Linzor en Chile, firma que, durante la década de los 2000 y 2010 se asomaba como una de las financieras con mayor actividad en el mundo del capital privado local.
El ingreso a Banmédica es la primera incursión de la firma en suelo chileno desde hace cinco años, mercado que actualmente representa el 14% de su cartera y que, en este momento, se encuentra principalmente expuesto en el segmento de la salud.
La administradora de fondos de private equity fue fundada en 2006 por los exJPMorgan, Tim Purcell, Alfredo Irigoin y Carlos Ingham, y en sus 19 años ha participado en la propiedad de distintas compañías locales. En total, aseguran haber invertido US$ 1.200 millones en la región desde los inicios de la firma.
Dentro del historial de los portafolios de sus fondos se encuentran la Universidad Santo Tomás, Komax -representante de marcas como GAP, Old Navy, The North Face y Brooks Brothers-, Mundo Pacífico y Cine Hoyts.
Su inversión en Uno Salud, cadena de clínicas dentales más grande en Chile a la que ingresaron a través de su fondo LCP III en 2020, era su única y más reciente posición local.

Regreso a la salud
Y no son nuevos en el negocio de la salud chilena. A fines de 2007, en asociación con el grupo Said, Linzor adquirió la isapre ING (antes llamada Cruz Blanca) por US$ 110 millones. Con su ingreso le devolvió el nombre de Cruz Blanca Salud, en la que alcanzaron un porcentaje máximo de en torno a 50% de la propiedad y lideraron una expansión de sus operaciones.
La desinversión de Linzor en el negocio comenzó en 2011 con la apertura en la Bolsa de Santiago de la empresa, ocasión con la que se redujo su participación a 21,6%. Al año siguiente, liquidó su participación restante a Cartica Management (6%) y mediante un remate en bolsa, en el que se deshizo de un 15% de la compañía.
En tanto, en Colombia actualmente participan del sector a través de Sies Salud, prestadora de servicios enfocados en enfermedades crónicas.
Si bien aún se desconoce el método en que participa en la compra de Banmédica, actualmente se encuentra en proceso de inversión de su cuarto fondo, LCP IV, lanzado en 2024, el que ya posee en cartera a la telco peruana Win.
El bolsillo brasileño
Linzor se sumó durante el proceso a la oferta de la gestora de fondos brasileña Patria Investments, dueña de la chilena Moneda Patria Asset Management.
Fundada en 1994 en Brasil, la firma es, a todas luces, una gigante: ya acumula US$ 50 mil millones en activos bajo gestión al cierre del tercer trimestre de 2025.
Sus fondos abarcan las clases de activos de infraestructura, acciones públicas, deuda privada y bonos, e inmobiliario. Pero el más grande es capital privado, donde a septiembre mantenían US$ 8.127 millones en capital comprometido por inversionistas a sus siete vehículos en esta categoría.
Y pese al panorama en la región, Patria se mantiene con capital fresco para ser invertido en compañías.
En detalle, de los US$ 1.504 millones comprometidos a su séptimo fondo de la estrategia de private equity, solo ha invertido US$ 676 millones, de acuerdo a los resultados del último trimestre. El sexto vehículo, en tanto, ha invertido US$ 2.274 millones de los US$ 2.689 millones acordados por inversionistas (ver recuadro).
El portafolio con el que la gestora brasileña opera en el sector salud de Colombia
Patria no es un actor improvisado en el negocio colombiano. La gestora opera una de las redes sanitarias privadas más extensas del país bajo la marca Zentria. Esta plataforma es controlada a través de Venum Investments, sociedad creada y registrada en España que funciona como su principal vehículo de inversión en Colombia.
Zentria agrupa hospitales privados, laboratorios y diversos prestadores de servicios de salud que, según su página web, buscan “unificar y centralizar los servicios de salud en un solo lugar, con el objetivo de poner a las personas en el centro de su operación”. Pero detrás de ese propósito hay una estrategia empresarial clara: integrar y escalar activos sanitarios regionales bajo una misma estructura operativa y financiera, financiada por el Fondo VI de Private Equity de Patria, que cuenta con más de US$ 2.689 millones comprometidos y tiene domicilio en las Islas Caimán.
A través de Venum, Patria controla clínicas e instituciones prestadoras de salud que, en conjunto, suman más de 2.400 camas y 8.500 colaboradores.
Entre sus activos más relevantes destacan tres grandes redes hospitalarias. Avidanti, que opera más de cuatro instituciones a nivel nacional y se especializa en servicios cardiológicos y de alta complejidad. Clínica General del Norte, con más de 10 centros hospitalarios y una presencia dominante en la Costa Caribe. Y la red Oncólogos del Occidente, que reúne nueve sedes enfocadas en atención integral para el tratamiento del cáncer.
Otros activos que manejan es Clínica Chía, especializada en servicios de segundo y tercer nivel de complejidad; Evedisa, dedicada a la distribución y dispensación de medicamentos para EPS; Ronelly, enfocada en la comercialización de insumos médicos, y Helpharma, orientada a la gestión integral del riesgo en enfermedades crónicas, integrando servicios médicos y farmacéuticos. A esto se suma Bienestar, una institución prestadora que se especializada en atención ambulatoria.
A través del holding Zentria, Patria administra una de las redes sanitarias privadas más extensas en el país cafetero.