Yamaha fue hoy el último fabricante japonés de la industria
automotriz en anunciar suspensiones de producción en varias plantas en Japón,
durante al menos una semana, informó la agencia local Kyodo.
Este destacado fabricante de motocicletas de Japón decidió
suspender la producción en once de sus plantas entre siete y diez días durante
los meses de febrero y marzo.
Las fábricas afectadas están ubicadas en las provincias de
Shizuoka y Aichi, en las que trabajan unos 5.100 trabajadores de plantilla y
900 empleados temporales.
La decisión de Yamaha afectará a la producción de
motocicletas, motos de agua y componentes, y se debe a que la demanda de esos
productos ha caído con fuerza debido a la crisis económica global.