El gasto del consumidor estadounidense anotó en abril su mayor incremento en más de seis años y la inflación avanzó con firmeza, en nuevas señales de una aceleración del crecimiento que podría persuadir a la Reserva Federal a subir las tasas de interés en junio.
El Departamento de Comercio dijo ayer que el gasto del consumidor, que representa más de dos tercios de la actividad económica de Estados Unidos, aumentó 1% el mes pasado debido a que las familias adquirieron automóviles y otros bienes y servicios, logrando su mayor salto desde agosto de 2009. Esto superó las estimaciones de los analistas consultados por Bloomberg de un incremento de 0,7%.
El gasto del consumidor en marzo fue revisado a la baja para mostrar que se mantuvo estable, en lugar de un alza de 0,1% como se había informado previamente.
En tanto, el índice de precios sobre el gasto en consumo personal (PCE, su sigla en inglés), que excluye a componentes volátiles como los alimentos y la energía, subió 0,2% el mes pasado, frente a un avance de 0,1% en marzo.
El ingreso personal, por su parte, aumentó 0,4% por segundo mes consecutivo.
Precios de casas
Un informe separado mostró que los precios anualizados de las casas subieron más de lo esperado en marzo.
El índice compuesto de S&P/Case Shiller de 20 áreas metropolitanas avanzó 5,4% en marzo frente al mismo mes del año anterior, igual que el mes previo y superando la estimación de un alza de 5,2% de los economistas encuestados por Reuters.
Los precios se elevaron 0,9% en marzo frente a febrero sobre una base desestacionalizada, mostró el sondeo, por sobre el 0,8% esperado y su mayor incremento en cuatro meses. Los precios a nivel nacional, en tanto, subieron 5,2%, frente al año anterior.
“La economía está apoyando las alzas de precios con la mejora en los mercados laborales, la caída en las tasas de desempleo y tasas hipotecarias extremadamente bajas”, dijo David Blitzer, presidente del comité de índice de S&P, en un comunicado.
