Argentina registra fuerte desaceleración en producción de acero en diciembre
Pese a la baja, el país marcó un récord en la producción al alcanzar 5,5 millones de toneladas.
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Argentina registró el año pasado un
récord en su producción de acero crudo, con 5,5 millones de
toneladas, aunque registró una fuerte caída en el último mes de
2008, según un informe del sector difundido hoy.
De acuerdo con el Centro de Industriales Siderúrgicos (CIS) de
Argentina, la producción total de acero crudo de 2008 "constituye la
cifra más alta de la serie histórica".
El informe explica que esta cifra anual, un 2,9%
superior a la del 2007, se logró "por las fuertes inversiones que
han realizado las empresas siderúrgicas del país en los últimos
años, que han permitido mantener altos niveles de producción en los
10 primeros meses de 2008, compensando la profunda caída del último
bimestre".
La producción argentina de acero crudo fue en diciembre pasado de
267.700 toneladas, un 31,6% menor respecto de los valores
de noviembre y un 45,4% inferior a la de diciembre de
2007.
En tanto, la producción de hierro primario de Argentina también
registró un fuerte descenso en diciembre, con 204.900 toneladas, un
29,3% menor a la de noviembre último y un 51,8%
por debajo de la del último mes de 2007.
El año pasado la producción de hierro primario de Argentina fue
de 4,4 millones de toneladas, frente a las 4,3 millones de toneladas
de 2007.
Según las empresas del sector, la crisis internacional "está
provocando una significativa reducción de la demanda de productos
siderúrgicos, observándose una disminución pronunciada y
generalizada en el uso de la capacidad instalada".
Esta situación, añadieron, obliga a todas las empresas del sector
a revisar sus planes de ampliación de capacidad, a la espera de que
el mercado se estabilice y recupere la tendencia alcista que
presentaba hasta hace unos meses.
Siderar, la mayor acería de Argentina, anunció la semana pasada
el aplazamiento de millonarias inversiones a causa de la crisis
financiera mundial, que le obligó a suspender a miles de obreros de
su planta de las afueras de Buenos Aires.