Bernanke al fin logra enviar mensaje que retiro del alivio depende de desempeño económico

Por Constanza Morales H.




Era quizás su última presentación ante el comité de servicios financieros de la Cámara de Representantes, pero ésa no era la razón de por qué todos estaban pendientes del testimonio de Ben Bernanke. Los comentarios que realizó el presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos la última vez que testificó ante el Congreso sobre un posible ajuste en la política monetaria atemorizaron a los mercados y se creía que podía ocurrir algo similar ayer.

Si bien Bernanke no mencionó nada nuevo, por primera vez en dos meses el banquero central logró transmitir claramente su mensaje sobre la posible reducción del estímulo sin precedentes.

En comentarios preparados, el economista afirmó que “por ningún motivo las compras de activos están en un rumbo predeterminado” y agregó que se considerarán los datos económicos entrantes para tomar decisiones.

“Si los datos son más fuertes de lo que esperamos, nos moveremos más rápido” para reducir las compras. Si las cifras “no satisfacen los tipos de expectativas que tenemos sobre hacia dónde va la economía, entonces retrasaríamos ese proceso o potencialmente aumentaríamos las compras por algún tiempo”, aseguró.

Ayer se conoció el Libro Beige de la Fed, que mostró que la economía mantuvo un “ritmo entre modesto y moderado” de crecimiento en las últimas semanas (ver recuadro).




Mercados captan 
el mensaje


Desde que el jefe de la Fed delineó el 19 de junio un cronograma para terminar con el programa de compras, las autoridades han intentado asegurarles a los inversionistas que el organismo mantendrá las tasas de interés en sus niveles mínimos después de terminar con las compras de activos.

El economista defendió su estrategia de comunicación diciendo que si la Fed no hubiese anunciado las guías a futuro, “hubiese arriesgado una dislocación, un movimiento de las expectativas del mercados lejos de las expectativas del comité, un creciente desarrollo de apalancamiento o de posiciones excesivamente riesgosas en el mercado”.

Bernanke agregó que “los mercados están comenzando a entender nuestro mensaje y obviamente la volatilidad se ha moderado”.



Política 
ultra flexible


La semana pasada, el banquero central manifestó que “la economía estadounidense necesita una política monetaria ultra flexible en el futuro inmediato”, mensaje que repitió tres veces ayer, ya que “la tasa de desempleo sigue muy por encima de su nivel normal a largo plazo” y porque la inflación está por debajo de la meta de 2%.

Si bien los riesgos para la primera economía del mundo han disminuido desde fines del año pasado, el presidente del ente emisor advirtió que el lento ritmo de la recuperación significa que “sigue siendo vulnerable a shocks inesperados, incluyendo la posibilidad de que el crecimiento económico global podría ser más lento que lo estimado actualmente”.

Además, “persisten los riesgos de que la ajustada política fiscal contendrá la expansión económica durante los próximos trimestres por más de lo que esperamos actualmente o de que el debate sobre otros temas de política fiscal, como el estatus del techo de la deuda, se desarrollará de una manera que podría dificultar la recuperación”, apuntó Bernanke.

Bienes raíces y construcción: la actividad en el sector inmobiliario creció a un ritmo entre moderado y fuerte en la mayoría de las zonas. Las condiciones del mercado comercial y de la construcción siguieron revelando mejoras.

Consumo y turismo: gran parte de las áreas mencionaron que el gasto en consumo se incrementó. Los viajes y el turismo subieron en siete de los distritos, mientras que dos mostraron resultados mixtos.

Banca y finanzas: los informes sobre las condiciones bancarias fueron en general positivos entre las regiones. La calidad del crédito mejoró, mientras que los estándares del préstamo se mantuvieron sin cambios.

Agricultura: las condiciones agrícolas variaron en los distritos debido a los diversos patrones meteorológicos. Algunas regiones se vieron afectadas por las intensas lluvias, mientras que otras registraron una sequía persistente.

Empleo, salarios y precios: la contratación se mantuvo firme o aumentó a un ritmo mesurado. La mayoría de los distritos reportó presiones salariales moderadas y los precios siguieron estables, aunque algunos informaron alzas.