La confianza de los consumidores italianos descendió en
agosto hasta los 104,1 puntos, el dato más bajo desde marzo de 2009, según los
datos difundidos hoy por el instituto de investigaciones ISAE.
Esta cifra supone un retroceso con respecto a los 105,5
puntos registrados el pasado mes de julio.
El descenso fue "especialmente marcado" en la
valoración de la situación personal de los entrevistados, que pasó de 119,3
puntos en julio a 116,4 en agosto, algo que se debe, según el ISAE, a la caída
en la valoración de los bienes de larga duración.
El descenso de la confianza también se produjo en las
previsiones futuras que ha pasado de 96,4 puntos del mes anterior a los 95,3
actuales.
Por su parte, el indicador sobre el cuadro económico general
mejoró del 79,8 registrado el mes pasado a 81 puntos en agosto, gracias a
"valoraciones positivas de la situación económica de Italia y a las
expectativas optimistas sobre el mercado de trabajo", añadió el ISAE.