El desempleo continuó estancado en junio en la zona del euro en 9,9%, mientras que en España volvió a subir y alcanzó el 21%, la cifra más elevada de toda la UE y la mayor registrada por este país desde el comienzo de la crisis económica.
La tasa se mantiene inamovible en los países de la moneda única desde el pasado marzo, al igual que en el conjunto de la Unión, donde el desempleo fue en junio del 9,4% por cuarto mes consecutivo, según los datos divulgados hoy por Eurostat, la oficina comunitaria de estadística.
La recuperación económica de la UE sigue así sin tener reflejo en el índice mensual de desempleo, aunque sí se aprecia una mejoría en términos interanuales, con una bajada de tres décimas con respecto a junio de 2010 tanto en la zona del euro como en los Veintisiete.
En España, la desocupación mantuvo su tendencia alcista iniciada en el cuarto trimestre de 2008, al subir dos décimas en comparación con el mes anterior y ocho décimas con respecto a junio de 2010.
El pasado mes de junio había en la UE unos 22,5 millones de desempleados, de los cuales 15,6 millones pertenecían a la zona del euro, lo que supone un descenso mensual de unas 38.000 personas en toda la Unión y un aumento de 18.000 en los países de la moneda única, según las estimaciones de Eurostat.
En los últimos doce meses, el número de desempleados registró una bajada de 706.000 personas en los Veintisiete y de 346.000 en la zona del euro.
Después de España, las mayores tasas de paro se registraron en Lituania (16,3 %) y Letonia (16,2 %), aunque los datos de estos dos países corresponden al primer trimestre del año.
Austria fue el Estado miembro con menos desempleo, con sólo un 4 %, seguido de Holanda (4,1 %) y de Luxemburgo (4,5 %).
En Alemania, la economía más importante de la UE, la desocupación se estabilizó en el 6,1%, mientras que en Francia subió una décima y alcanzó el 9,7%.
En comparación con junio de 2010, la tasa de paro disminuyó en diecinueve estados miembros, aumentó en siete y se mantuvo estable sólo en Luxemburgo.
Las bajadas interanuales más significativas tuvieron lugar en Estonia (del 18,8 % al 13,8% entre los primeros trimestres de 2010 y 2011), Letonia (del 19,9% al 16,2%, entre los mismos períodos) y Hungría (del 11,3% al 9,9%).