EMI Music golpeada por la deserción de Robbie Williams

EMI, el grupo de música de Reino Unido que está a punto de ser subastado, ha perdido a Robbie Williams, uno de sus principales artistas, ante el estudio rival Universal Music para su nuevo álbum solista que será lanzado el próximo otoño. El cambio a Universal Music llega tras años de turbulencia en EMI, también la casa de Kylie Minogue y Katy Perry. La compañía se ha sometido a varios cambios de gestión, fuertes recortes de gastos, la pérdida de varios artistas destacados y ahora está siendo vendida.

Williams se unió a EMI en 1996 y ha sido su casa por más de 13 años, lanzándolo en una meteórica carrera de solista. Él firmó un nuevo trato con la compañía en 2002, por decenas de millones, pero su último contrato terminó hace 18 meses después del lanzamiento de su álbum de Grandes Éxitos.

“Estoy realmente encantado de unirme a la familia Universal en lo que pienso es el momento más excitante en mi carrera”, dijo Williams.

Universal se negó a comentar respecto al valor del trato por un solo álbum. Bajo el contrato, proveerá servicios de marketing, distribución y merchandising.

“Este gran nuevo trato pone a Robbie Williams firmemente en control de su propio destino, pero con los socios más fuertes”, dijo Tim Clark, manager de Williams desde 1995.

Era entendible que Williams estuviese descontento con los antiguos dueños de EMI, la firma de private equity Terra Firma, manejada por Guy Hands. Clark acusó a Hands de actuar como un “hacendado” en 2008, cuando The Rolling Stones, Radiohead y Paul McCartney dejaron el estudio. Citigroup tomó el control de EMI de manos de Hands en enero y está vendiéndola en cerca de US$ 3.000 millones. Se espera que el banco informe sus mejores postores próximamente.

Hay temores de que la venta pueda descarrilarse si el banco no puede conseguir altas ofertas de los postores.

Citi espera vender la compañía en dos partes, publishing y grabado de música. Las ofertas de EMI Music Publishing han estado en alrededor de 
US$ 1.700 y US$ 2.500 millones, de acuerdo a dos personas que siguen el proceso, y la unidad de grabación ha tenido ofertas entre US$ 1.000 y 
US$ 1.300 millones.