Nuevos datos publicados ayer revelan que Francia sigue débil, mientras Italia cae más de lo esperado.
Según el banco central galo, el PIB crecería 0,1% en el segundo trimestre, luego que el país entrara en recesión tras una contracción de 0,2% en los primeros tres meses del año.
En una señal positiva separada para la segunda mayor economía de la zona euro, datos de ayer mostraron que la producción industrial aumentó 2,2% en abril respecto de marzo, mientras que la confianza en el sector se mantuvo sin cambios en mayo respecto de abril, en 94 puntos.
Sin embargo, el indicador para el sector de servicios cedió ligeramente a 88 puntos desde 89 en abril, lo que lo lleva a su nivel más bajo desde julio del 2009.
En Italia, en tanto, las autoridades revisaron a la baja su cálculo del PIB en el primer trimestre. La economía romana se contrajo 0,6% en los primeros tres meses de 2013 por la débil demanda interna, más que el 0,5% calculado previamente, informó el ente estadístico ISTAT.
Asimismo, las exportaciones cayeron 1,9% en dicho período, la baja más pronunciada desde los primeros tres meses de 2009.
El PIB está más de 7% debajo de su nivel de fines de 2007, el ingreso disponible de los hogares es un 9% menor, la producción industrial un 25% y las horas trabajadas un 5,5%, según el banco central. La mayoría de los economistas espera que la tercera economía de la eurozona se contraiga 1,5% este año, tras caer 2,4% en 2012.