El presidente de la Confederación Nacional de Transporte (CNT), el senador Clésio Andrade (PMDB-MG), planteó ayer que crece el riesgo de que las elecciones de 2014 en Brasil se resuelvan en una segunda vuelta. Esto, pese a que la popularidad de la presidenta Dilma Rousseff sigue siendo alta y a que los escenarios incluso contemplan hasta ahora su posible reelección en una primera medición, tal como lo demostró la encuesta llevada a cabo por el instituto MDA a petición de la entidad gremial.
Según el dirigente, la expectativa de los votantes sobre la economía se deterioró, así como la evaluación de las políticas del gobierno federal en las áreas de salud, seguridad y educación.
Para el 39,6% de los encuestados, la situación del empleo en Brasil mejorará en los próximos seis meses. Sin embargo, el 44,5% cree que la situación actual se mantendrá igual y el 11,5% prevé un empeoramiento en relación con el escenario actual. En julio del año pasado, el 54,1% estimaba que la situación laboral en el país mejoraría, frente al 9,6% que veía un deterioro y el 32,2% que apostaba a que la situación sería la misma en los próximos seis meses.
“La popularidad es todavía muy alta, pero el gobierno no puede descuidar estos temas”, dijo Clésio, alertando sobre el bajo crecimiento económico, la inversión y el dólar alto. “La inflación es lo que pesa más”, afirmó.
El presidente recordó que los posibles rivales de CNT en la elección presidencial 2014, el senador Aecio Neves (PSDB-MG), la ex ministra de Medio Ambiente, Marina Silva y el gobernador de Pernambuco, Eduardo Campos (PSB), son desconocidos en relación a la mandataria y, por lo tanto, tienen potencial de crecimiento hasta octubre del año venidero.
En una medición realizada entre 755 personas que conocen a todos los candidatos presidenciales, dijo Clésio Andrade, la intención de voto de la presidenta Dilma alcanza al 44,1% de los votos, seguido por Aecio Neves (22,8%), Silva (14,2%) y Eduardo Campos (5,8%). Esto contrasta con el 52,8% obtenido al considerar la muestra completa de encuestados, lo que le da el triunfo en primera vuelta. “Se comienza a acercar a la segunda ronda”, dijo el titular de la CNT.
En todo caso, Rousseff continúa prevaleciendo sobre sus oponentes en los distintos escenarios.
En términos generales, la encuesta mostró que la aprobación del gobierno brasileño actual retrocedió de 56,6% a 54,2%. Y, en particular, la popularidad personal de la presidenta se redujo del 75,7% al 73,7%.
El sondeo consideró la opinión de 2.010 personas en 134 distritos de 20 Estados, entre el 1 y el 5 de junio de 2013. El margen de error es de 2,2 puntos porcentuales.