El Gobierno peruano decretó hoy una
serie de
medidas económicas y financieras que incluyen la reducción del gasto
público y un ahorro de más de unos 2.300 millones de soles (más de
US$ 800 millones), para afrontar una eventual expansión
internacional de la crisis griega.
La ministra de Economía y
Finanzas, Mercedes Aráoz, explicó hoy a
la emisora Radio Programas del Perú (RPP) que estas medidas han sido
tomadas en la eventualidad de que pudiera "haber una crisis pronto",
y remarcó que "lo mejor es para guardar cosas para el futuro".
Aráoz
enfatizó que su país debe actuar con "prudencia" y ahorrar,
aunque minimizó los temores de que la situación en Grecia genere una
crisis mundial tan grave como la de 2008.
Las medidas publicadas
hoy en el boletín de normas legales del
Estado fueron adoptadas debido a que "se observa que el déficit
fiscal y el crecimiento del gasto de consumo del Gobierno central
para el año fiscal 2010 estarían por encima de los límites
establecidos" y para "evitar presiones inflacionarias".
Así, el
crecimiento en los gastos de Bienes y Servicios no podrá
ser mayor del 3% respecto a lo ejecutado en 2009, y los
proyectos de inversión pública que no se hayan ejecutado este año
sólo podrán ser ejecutados hasta en 25% de su monto total.
El
Gobierno también suspende las nuevas operaciones de
endeudamiento y utilizará el Fondo de Contingencia sólo para casos
de emergencia.
La ministra señaló que calcula que el
impacto de las medidas
adoptadas por el Gobierno para ser implementadas en los próximos
siete meses representan el 1,5% del Producto Interior
Bruto (PIB), una cifra que, según dijo, "es realmente un monto muy
pequeño".