Los precios de los mayoristas
aumentaron en julio en Estados Unidos por primera vez en cuatro
meses, al registrar una ligera alza de 0,2%, impulsados
por el encarecimiento de alimentos y de bienes de consumo.
Este
incremento se produce después de una caída del 0,55 en junio, del 0,3% en mayo y del 0,1% en
abril, informó hoy el Departamento de Trabajo.
En términos
interanuales, los precios aumentaron un 4,2%, lo que representa el noveno mes consecutivo en el que
registran un incremento.
Si se excluyen los precios de los
alimentos y la energía, la
inflación subyacente mayorista subió un 0,3% el mes
pasado, el noveno mes en el que aumenta.
Los precios para los
alimentos registraron un incremento del 0,7%, en tanto que los de la energía bajaron un 0,9%.
El Índice de Precios del Productor (IPP) hace un
seguimiento de
los precios de los productos antes de su llegada a las tiendas y se
considera un buen indicador inicial de tendencias en materia de
precios.