Los mercados vuelven a reactivar sus alertas sobre Grecia. La
confirmación de una inminente emisión de bonos, la primera de 2010 y en
plena crisis financiera del país, dispara el diferencial de deuda por
encima de los 300 puntos básicos, renovando los máximos desde su
incorporación a la zona del euro.
Grecia sigue acaparando buena parte del protagonismo en los
mercados europeos, y no sólo en los de renta fija.
A media sesión, su
diferencial de rentabilidad de la deuda con Alemania marcaba nuevos
máximos desde la introducción del euro, 313 puntos básicos, superando el récord registrado ayer.
Los rumores sobre un hipotético rescate por parte de la Unión Europea
situaron el riesgo país de Grecia por encima de la barrera de los 300
puntos. El posterior desmentido por parte del Gobierno griego relajó
esta brecha.
La relajación ha resultado efímera, y se ha truncado, en buena medida, por la confirmación de una próxima emisión de bonos
por parte de Grecia. El máximo responsable de la agencia de emisión de
deuda pública del país, Spyros Papanicolaou, reconoció que "a corto
plazo" lanzarán bonos a cinco o diez años, por un importe de al menos
3.000 millones de euros.
La cuantía de la emisión podría ser
mayor si lo permite la demanda, tal y como ha apuntado Spyros
Papanicolaou.