Si bien durante 2013 los préstamos a las familias peruanas siguieron avanzando, lo han hecho a un menor ritmo en términos anualizados.
En su Informe de Estabilidad Financiera, el Banco Central explicó que la desaceleración de las deudas de consumo estuvo asociada, en parte, a las medidas correctivas implementadas por las entidades financieras en su política de créditos. A ello se añadieron las iniciativas regulatorias prudenciales adoptadas a inicios de año por la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
Además, analistas y ejecutivos del sector bancario coinciden en que el menor crecimiento de la economía peruana en los primeros nueve meses del año también moderó la demanda por este tipo de créditos.
Así, el préstamo promedio que mantienen los hogares peruanos (de consumo e hipotecarios) con el sistema financiero se incrementó 5,3% entre marzo y septiembre de este año, al pasar de 14.571 soles (unos US$ 5.200) a 15.341 soles (unos US$ 5.500). Pero este aumento reflejó que el número de deudores creció a un menor ritmo que el saldo total de sus deudas (3,5% y 9%, respectivamente).
En el caso de las personas que solo tienen préstamos de consumo, la deuda promedio se elevó 2,7% hasta los 8.248 soles (unos US$ 2.960) en septiembre.
Al noveno mes, las colocaciones de consumo se expandieron a un ritmo de 10,6%, mientras que a marzo lo hicieron a una velocidad de 12,5%.
En el caso hipotecario, el crecimiento fue de 19% contra un 23,8% previo.
Tarjetas de crédito
Pero el negocio más golpeado dentro del financiamiento del consumo fue el de tarjetas de crédito. Al cierre de octubre el préstamo a través de plásticos tuvo un crecimiento anual de solo 7,8%, nivel mucho menor al observado en 2012 (en torno al 20%).
La línea de crédito promedio por tarjeta de crédito autorizada o aprobada por las instituciones financieras se redujo 5,4% en lo que va del año. A fines del año pasado era de 6.439 soles (unos
US$ 2.300) y cayó a 6.094 soles (unos US$ 2.100) en septiembre de 2013.
En ese mismo período también disminuyó ligeramente el porcentaje de uso de la línea autorizada promedio por tarjeta, de 26,2% a 26,1%.
A septiembre, había más de 2,4 millones de personas que cuentan con al menos un plástico en su poder. El Banco Central detalló que el 59,7% de ellas tiene deudas con una sola entidad financiera, y resaltó que el número de clientes compartidos con tres o más de estas instituciones disminuyó este año.
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