La recuperación del mercado inmobiliario estadounidense quedó otra vez en duda tras la publicación del dato de venta de
viviendas usadas.
Según la Asociación nacional de Agentes de
Bienes Raíces, en el mes de febrero se registró una caída en tasa anualizada
de 7,2%, a 5,05 millones de unidades, lo que representa su nivel más bajo en
siete meses.
Con este son ya dos meses consecutivos de recortes en la venta
de viviendas usadas, lo que ha generado cierto pesimismo entre los analistas
del sector.
Lawrence Yun, economista especializado en el mercado
inmobiliario, reconoce que "estas no son buenas noticias. Hay una
preocupación creciente acerca de la fortaleza de la recuperación en el sector
de la vivienda".
En enero el inventario de viviendas usadas a la venta bajó
un 0,5%, hasta 3,265 millones de unidades, lo cual equivale a 7,8 meses de
suministro al ritmo de ventas en ese mes. El precio media de la vivienda usada
fue de 164.700 dólares, una cifra similar a la de un año antes.