Las espectaculares cifras del precio del petróleo se han trasladado
a los resultados de las dos mayores petroleras europeas. BP y Royal Dutch Shell
superaron las previsiones del mercado, y pasan a encabezar hoy las subidas en
las bolsas europeas, con revalorizaciones superiores al 4%.
Las petroleras parecen dispuestas a poner el contrapunto a
las cuentas de la banca. La crisis crediticia ha pasado por alto en los
resultados del primer trimestre en compañías como BP y Royal Dutch Shell. En
estos casos, el factor más decisivo han sido los enésimos récords históricos
registrados por el precio del crudo en el inicio del año, en una escalada que
continúa hasta los máximos alcanzados ayer, al borde de los 120 dólares.
Sólo en los tres primeros meses del año, BP sumó unos
beneficios récord de US$ 7.620 millones, con un 63% de incremento respecto al
mismo periodo del año anterior.
Las cifras de Shell son aún más espectaculares, con unas
ganancias de US$ 9.080 millones, unos 5.837 millones de euros, aunque el
aumento sea algo menor que en el caso de BP, un 25%.
Los resultados tanto de BP como de Shell superan con creces
los pronósticos que barajaban los analistas. Esta sorpresa se refleja en el
hecho de que las dos compañías petroleras se sitúen al frente de las subidas
del índice Ftse de Londres, con un 4,6% de revalorización para BP y un 4,1%
para Royal Dutch Shell.