Dólar vuelve a caer frente al peso y alcanza los $ 662,1, su menor valor en dos meses
La divisa norteamericana retrocedió ayer 0,73%, en una semana marcada por la entrada de flujos extranjeros a Latinoamérica.
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Sin duda que volatilidad es la palabra que define a los mercados. Porque desde la semana previa al referendo del Reino Unido, llevado a cabo el jueves pasado y en donde el país decidió finalmente salir de la Unión Europea, ahora la inestabilidad le está jugando a favor al mercado chileno, partiendo por la apreciación del tipo de cambio.
Ayer por segunda jornada consecutiva, el peso chileno se apreció frente al dólar. La moneda norteamericana cayó 0,73%, lo que permitió que ésta se ubicara en $ 662,1, su menor valor en dos meses, desde el 2 de mayo pasado.
Lo ocurrido con la moneda local frente al dólar no es distinto al desempeño del resto de las monedas de países emergentes. “El apetito por riesgo llegó con fuerza a mercados emergentes, en particular a los mercados latinoamericanos, con fuertes alzas en México, Colombia y Brasil”, dice Jaime Fernández, Gerente de Trading Banco Internacional.
En la jornada el peso mexicano se apreció 1,53%, el peso colombiano 3,05% y el real brasileño, un 1,72%. Por lo que la apreciación de la moneda local se podría definir como la más acotada.
Las razones
Detrás de este buen desempeño de las monedas de la región, habría dos razones principales: la búsqueda de alternativas de inversión tras el torbellino provocado por el Brexit, y la cada vez más real opción de que la Reserva Federal de Estados Unidos no lleve a cabo más alzas de tasas durante este año.
Combinación que ha provocado que en los últimos días la entrada de capitales a los mercados de la región, entre ellos el chileno, alcanzara números relevantes. De acuerdo al informe de Bci Estudios, se observa arme de carry trade por US$1.700 millones en la última semana.
“Lo que gatilla eso son inversionistas extranjeros en búsqueda de tasas más atractivas”, dice Antonio Moncado, economista de Bci Estudios.
Además, agrega que un segundo factor podrían ser los inversionistas institucionales, específicamente las AFP, que habrían sacado dinero de renta variable internacional para recurrir a instrumentos más seguros en el mercado chileno.