Propuestas en materia de políticas sociales fue uno de los temas que se tomó el último debate presidencial organizado por Anatel.
Por el lado de la vivienda, los candidatos de Unidad por Chile -desde el PC hasta la DC-, Jeannette Jara y el de oposición, José Antonio Kast (Republicano), abordaron el desalojo de la toma de San Antonio, el anuncio de un proceso de expropiación y los dichos del ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, quien apuntó a la existencia de “varias filas”, porque “las realidades son distintas”.
Ante el proceso, la candidata Jara aseguró que “no estoy de acuerdo" con los dichos del titular de la cartera.
"De partida me parece un error, creo que en Chile lo peor que nos puede pasar es que no se respete la fila y lo hemos visto con gente que promueve intereses ocultos, con gente que tiene ciertos lobbies económicos, con gente que hace cierto que distintos intereses estén por sobre los intereses comunes de la ciudadanía”, apuntó la abanderada oficialista.
En esta línea, añadió que “en Chile tiene que haber una sola fila y la verdad no tengo ni idea porque lo dijo Carlos Montes, y en mi gobierno eso no va a pasar”.
“Respecto a este caso puntual, es muy probable que no se resuelva durante este gobierno, ni siquiera los desalojos se van a poder concretar durante este gobierno”, aclaró.
Consultada sobre si continuará el proceso de expropiación, afirmó que “a quien elijan los chilenos y chilenas va a tener que continuar con esta medida, primero, porque está dentro de la ley, y en segundo lugar, porque aquí hay 10.000 familias y personas que están en esta toma”.
Lo anterior “salvo que quieran echarlos a alguna plaza imaginaria a pasar frío, (el que) no es mi caso”.
Por su parte, Kast señaló ante el proceso de desalojo y expropiación que “vamos a hacer que se cumplan los fallos judiciales, no vamos a dilatar ficticiamente (como) el ministro Montes, (quien) primero dilata diciendo que va a organizarlos en comités para comprar, después dice que va a expropiar”.
“Vamos a cumplir el fallo, sean 100.000 o 10.000 familias que estén en un terreno usurpado, tienen que dejarlo y como lo tienen que dejar pidiéndole espacio a alguien en su terreno, al gobierno que provisoriamente por uno o dos meses le dé una solución provisoria, pero el día que corresponda van a estar los camiones dispuestos para que ellos carguen sus enseres, porque si no lo hacen al día siguiente nosotros vamos a tener que tomar medidas de fuerza”, añadió.
Respecto a la expropiación, añadió que “si ellos (el Gobierno) expropian, ese terreno expropiado va a ser para los allegados de Chile que no se han saltado la fila. Jamás vamos a hacer dos filas y jamás vamos a permitir que alguien más se salte la fila. Esos allegados que hoy día están esperando, son los que van a ser los titulares de ese terreno, si es que lo llegan a expropiar”.