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Tensión interna en la DC por resultado parlamentario

En la colectividad admiten que la correlación de fuerzas puede influir en el destino del partido de cara al próximo gobierno.E

Por: Claudia Rivas A. | Publicado: Jueves 2 de noviembre de 2017 a las 04:00 hrs.
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A poco más de 15 días de las elecciones presidenciales y parlamentarias, la Democracia Cristiana tiene su mirada puesta en esta última. No sólo porque muchos dirigentes y representantes del partido creen que es muy probable que no haya balotaje, sino también porque del resultado parlamentario del falagismo depende la correlación de fuerzas al interior de la colectividad y, por ende, la línea que pueda seguir la tienda en el futuro.

Es decir, dónde se ubicará la DC de cara a un próximo gobierno. Hace meses que el debate sobre ese tema está instalado en el partido y ha cruzado la campaña presidencial, ya que -según la disidencia- la certeza que ha dado la abanderada respecto a que el domicilio político de la colectividad está en la centroizquierda ha sido demasiado vago, lo que abrió el temor de que el sector más conservador empuje a la Democracia Cristiana ya sea al camino propio, en solitario, o hacia la derecha. En contraste con la disidencia que aspira a mantenerse en una coalición de centroizquierda, lo más amplia posible, sobre todo si tienen que hacer oposición.

De ahí la importancia de qué candidatos se impongan para llegar o mantenerse en el Senado y en la Cámara Baja. En este contexto, ha llamado la atención de la militancia de la Quinta Región que algunos ex ministros, como Jorge Burgos y Soledad Alvear, se hayan trasladado hasta esa zona para apoyar la candidatura del senador Ignacio Walker, quien aspira a la reelección.

En esta circunscripción compiten el senador Ignacio Walker que aspira a mantenerse en la Cámara Alta y el diputado Aldo Cornejo, uno de los líderes de la disidencia falangista. En ese sector de la DC calculan que si el expresidente de la Cámara Baja se impone al extimonel de la tienda; en La Araucanía Francisco Huechumilla logra llegar al Senado, superando a su compañero de lista, el actual diputado Fuad Chahín; y, la diputada Yasna Provoste también obtiene un escaño en el Senado, las fuerzas del falangismo en esa instancia cambiarían radicalmente, imponiéndose una mirada más progresista.

Si, además, en la Región del Maule la exministra Ximena Rincón superara en votación al presidente del Senado, Andrés Zaldívar, arrebatándole su escaño, sería un triunfo completo para el prgresismo de la Democracia Cristiana.

La fuerza de los apoyos

En el complejo escenario interno que enfrenta la DC, en que tiene que decidir acerca de su futuro político, todos los apoyos que contribuyan a matener la influencia de cada sector en el Congreso son apreciados y ayudan a desbalancear la ventaja de un candidato sobre otro. Por lo mismo fue el propio senador Ignacio Walker quien subió a su cuenta de Twitter fotos en que figura el exministro del Interior y jefe de campaña de la senadora Carolina Goic, Jorge Burgos, colaborando en una visita a una feria junto con un grupo de voluntarios que trabajan por el senador en la región. También fue a respaldarlo la exministra Soledad Alvear, comentan en el partido, lo que generó incomodidad en el entorno del otro candidato DC a la Cámara Alta en la zona.

Aunque públicamente la mayoría de los representantes de la DC elude el tema de lo que deberá enfrentar el partido tras el proceso eleccionario, todos están conscientes de que lo que se juega el falangismo es mucho más que una bancada de senadores o de diputados -y así lo comentan en privado-, sino la influencia de la colectividad y de qué forma se expresará en un escenario que ya se percibe como adverso: no hay posibilidad alguna de que lleguen a La Moneda en esta elección y su peso parlamentario podría disminuir drásticamente.

Mayoritariamente en la DC opinan que la mejor forma de ejercer influencia política siendo oposición es desde el Congreso. Justamente por eso es que para todos es importante seguir en esa esfera de acción, pero la forma cómo se hará -de concretarse ese escenario- es lo que diferencia a unos y otros.

Por lo mismo es que la disidencia y quienes se han autodenominado “progresistas con progreso” se disputan a quedar con una mayor representación parlamentaria. Si estos últimos no logran su cometido tendrán que buscar otra forma de expresión política, por lo que en el partido no se descarta una escisión de quienes están por una posición más conservadora.

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