Por Gonzalo Cerda M.
La caída acumulada de 9% que registra el dólar en lo que va del año ha impactado directamente en el sector frutícola que acusa pérdidas por alrededor de US$ 400 millones. Si se suma a la industria agrícola, las pérdidas alcanzarían más de
US$ 800 millones, así lo describieron desde el sector.
Es este escenario de menores ingresos el que mantiene preocupados y en alerta a los exportadores y productores de fruta del país. Ayer, el presidente de la Federación de Productores de Fruta (Fedefruta), Cristián Allendes, se reunió con el presidente del Banco Central, Rodrigo Vergara, para solicitar una nueva intervención del mercado cambiario, dada, según explicó, la sólida situación fiscal y el bajo registro de inflación previsto para la economía. “Es un buen momento para que el Banco Central compre divisas, intervenga el mercado y acumule reservas, tal como lo han sugerido algunos reconocidos economistas”, emplazó Allendes.
La estrategia de los productores y exportadores va más allá de la sola intervención del Banco Central, según reconoció el titular de Fedefruta, la idea es poder reunirse con los ministros de Agricultura y Hacienda, tal como lo hicieran la semana pasada al reunirse con el titular de Economía, a quien le solicitaron “más apoyo del gobierno” para el sector y agilizar las medidas de apoyo que está impulsando la cartera y que están directamente relacionadas con la agenda de impulso competitivo y de fomento a las PYME vía Corfo.
Tal como reconoció Allendes, la caída del tipo de cambio es algo que sorprendió al sector. “Pensábamos que se mantendría por sobre los
$ 500, pero esta caída tan rápida nos ha pillado de sorpresa por eso estamos pidiendo reuniones con autoridades para ver cómo nos pueden ayudar”.
De igual forma, para la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile (Asoex), la caída del tipo de cambio llama la atención dado el “movimiento contrario del peso, a diferencia de las otras monedas, particularmente en los meses de junio y julio”. Para su presidente Ronald Bown, la baja en la demanda de las exportaciones y la recesión europea “debieran provocar un efecto negativo en las expectativas del sector frutícola para la próxima temporada”, advirtió Bown.
Esta situación, a su juicio, hace que los exportadores prevean menores retornos netos debidos a una menor competitividad producto de la combinación de mayores salarios, mayores costos de energía y menores márgenes.
El rol del gobierno
Además de las demandas por una intervención cambiaria, los productores y exportadores apuntan a un rol más activo del gobierno en promover herramientas que permitan mitigar la pérdida de competitividad del sector. En ese sentido, Allendes criticó el desempeño que ha tenido el BancoEstado en materia de financiamiento. “El gobierno tiene herramientas para ayudarnos a ser más competitivos, no queremos subsidios especiales, pero creemos que hay herramientas económicas (...) el gobierno le ha dado autoridad para que sea igual que cualquier banco comercial y no cumple ninguna labor de apoyo, y en cambio debiera ser el fomento a la producción en Chile y eso no se condice con su condición”, enfatizó.
En tanto, el presidente de Asociación de Exportadores de Manufacturas (Asexma), Roberto Fantuzzi, criticó la falta de una política exportadora del país que “permita hacer frente a los vaivenes de la economía que impacta directamente en los exportadores”.