Durante la mañana de ayer aterrizó, luego de 14 años de ausencia en el mercado nacional, la aerolínea KLM, que adicionará una nueva oferta de vuelos a los que ya ofrece su aerolínea fusionada Air France. Esta vez la nueva ruta será Santiago-Amsterdam, vía Buenos Aires.
El gerente general de Air France-KLM en Chile, Fabio Andaloro, adelanta que a las tres frecuencias que tendrán semanalmente con KLM, sumarán una cuarta a partir de octubre. Además, prevé que tendrán entre un 85% y 90% de ocupación en sus vuelos, donde aproximadamente un tercio de los pasajeros hacia Amsterdam provendrán de Chile y los otros abordarán procedentes de Buenos Aires.
Para KLM la ruta hacia Chile será una de las más largas de toda su red y operarán con los Boeing 777-300. Eso, hasta que empiecen a recibir los Boeing 787 (o Dreamliners) y los Airbus 350 a partir de 2015. “Ahí podríamos pensar en operar Amsterdam-Santiago sin escalas”, asegura Fabio Andaloro. Esta nueva ruta hacia Chile significó una inversión “entre 30 y 50 millones de euros”, explica el ejecutivo, quien además espera que la operación signifique que Air France-KLM consolide su liderazgo en tráfico entre Chile y Europa, con una expectativa de 40% de participación de mercado en la ruta.