Los fabricantes chinos proveerán a los hogares de juguetes
seguros durante la
próxima Navidad "trayendo la felicidad a los niños y
adultos de otros países", aseguró hoy el vocero del
Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Qin Gang.
Después de que el año pasado los jugueteros chinos tuvieron
que enfrentarse a distintos escándalos por juguetes elaborados con materiales
tóxicos, Pekín afirmó hoy que este año se garantizará la calidad de estos
productos.
"El Gobierno chino presta mucha atención a este asunto
y reclamará a los productores chinos que hagan lo mismo", explicó Qin, que
señaló que los controles en los juguetes se han incrementado, especialmente
para aquellos destinados a la exportación.
Así, se llevarán a cabo un mayor número de inspecciones y
supervisión de las plantas y el vocero chino afirmó que "si se halla
cualquier problema, se prohibirá la exportación de ese producto".
Sin embargo Pekín instó a tener una visión "objetiva,
justa y científica" del problema de la contaminación en los juguetes,
"porque los productores chinos trabajan sobre la base de diseños
extranjeros".
En este sentido, Qin animó a los industriales chinos a subir
el listón de calidad en la producción pero también a supervisar los diseños
provenientes de otros países y rechazarlos en caso de encontrar disfunciones.
China es el mayor exportador de juguetes del mundo, con
22.000 millones de estos productos vendidos en los mercados internacionales,
según cifras de 2006, lo que supone el 60% de la cuota mundial.
El año pasado, la firma estadounidense Mattel retiró 20
millones de juguetes fabricados por sus filiales en China, lo que obligó a
Pekín a iniciar investigaciones en el sector y que concluyeron con la retirada
de las licencias de exportación a 600 jugueteras del país asiático.
"La Navidad está llegando y deseamos que todos los
niños del mundo la disfruten", señaló el vocero chino.