La compañía finlandesa de telecomunicaciones Nokia anunció esta
mañana que despedirá a 1.700 trabajadores en todo el mundo con el
objetivo de recortar los gastos productivos y garantizar la futura
competitividad de la empresa.
Nokia, el mayor fabricante mundial de teléfonos móviles, aseguró en un comunicado que estos despidos forman parte de un plan
de racionalización cuyo fin es "incrementar la eficacia en los costos y
adaptarse a la situación del mercado".
La mayor parte de los despidos se producirán en las unidades de
teléfonos móviles, mercados y desarrollo corporativo, principalmente en
Finlandia, donde unas 700 personas perderán su trabajo, así como en
Estados Unidos y Gran Bretaña.
El fabricante finlandés anunció, además, que pretende seguir recortando sus gastos operativos, para lo
cual está examinando "todas las áreas y actividades de la compañía".