La Comisión de Valores de EE.UU. (SEC, por su sigla en
inglés) acusó formalmente al banco Goldman Sachs de fraude, al constatar que
trató de sacar provecho del derrumbe del mercado hipotecario.
El regulador del mercado estadounidense acusó al mayor banco
de inversión en Wall Street por fraude por omitir información sobre CDOs, un
producto financiero de renta fija que agrupaba bajo un sólo paraguas varias
emisiones de deuda distintas y que se colocaba entre inversores
institucionales. La noticia ha caído como un jarro de agua fría en Goldman
Sachs, que ve como su cotización pierde ya cerca del 8%.
Los motivos por los que la SEC culpa a Goldman Sachs son
varios. Primero, el regulador estadounidense señala que "el vicepresidente
de la entidad, Fabrice Tourre, estafó a los inversores al lanzar información
correcta y omitir factores clave acerca de productos financieros agregados a
hipotecas basura en cuanto el mercado inmobiliario estadounidense comenzó a dar
síntomas de debilidad".
En su declaración, la SEC también alega que "el fondo
de inversión en capital riesgo, Paulson & Co, pagó a Goldman Sachs una
transacción en la que podría tomar posiciones cortas contra valores
hipotecarios".
Tras la demanda presentada en un tribunal civil, la primera de este tipo de la
autoridad reguladora, las acciones de Goldman Sachs caían en Wall Street cerca
de un 7%.