El primer
fabricante mundial de automóviles, Toyota Motor, recortó hoy sus previsiones de
pérdidas para el presente ejercicio fiscal, después de volver a las ganancias entre
julio y septiembre por primera vez en un año.
El
beneficio neto de Toyota en el segundo trimestre del año fiscal nipón fue de
21.800 millones de yenes (unos US$ 239 millones), un 84% menos que en el mismo
período de hace un año, pero suficiente para salir de los números rojos por
primera vez desde mediados de 2008.
Si en
agosto pasado el gigante japonés esperaba perder 450.000 millones de yenes
(3.360 millones de euros) durante este ejercicio fiscal -que concluye en
marzo-, ahora prevé contraer su pérdida neta hasta los 200.000 millones de
yenes (1.488 millones de euros).
Ha sido la
tercera vez que Toyota reduce sus previsiones de pérdidas desde mayo de 2009.
El recién
estrenado primer fabricante mundial de automóviles por ventas -y el que hasta
hace dos años era el que más ganaba de entre los grandes- cerró el pasado año
fiscal con sus primeras pérdidas netas y operativas en sus más de siete décadas
de historia.
Los
recortes de gastos del plan de ahorro de Toyota -al que se sumó ayer el fin de
su participación en la costosa Fórmula Uno- han acelerado la recuperación,
según destacó la multinacional japonesa en un comunicado.