Hoy será una jornada de alta tensión para los inversionistas y reguladores financieros a nivel mundial. Mientras en un extremo del planeta, el Banco de Japón (BoJ) podría anunciar nuevas medidas para reactivar la economía, al otro, los representantes de la Unión Europea entregarán los resultados de las pruebas de esfuerzos realizadas a los bancos de la región.
Ambos eventos podrían tener grandes repercusiones para el panorama económico. En Japón, donde el instituto emisor concluye hoy su segundo día de reunión de política monetaria, el BoJ quedó bajo presión para actuar, luego de que durante la semana el primer ministro Shinzo Abe lanzara un paquete de estímulo por US$ 267 mil millones. Los expertos ahora esperan que el banco central anuncie una política más expansiva, a con medidas concretas para combatir la deflación.
En Londres, en tanto, se darán a conocer hoy a las 9:00 de la noche los resultados de la más reciente prueba de resistencia aplicada a las entidades de Europa. La Autoridad Bancaria de la Unión Europea (EBA) entregará los resultados del examen aplicado a 51 prestadores que suman cerca del 70% del total de activos del bloque.
La publicación determinará el nivel de confianza de los inversionistas en las instituciones y tendrá efectos en la bolsa el lunes, al dar a conocer posiciones capitales, exposiciones al riesgo y propiedades en deuda soberana de las instituciones.
El aumento de capital de la banca europea “ha sido sustancial, pero, ¿significa ello que el ajuste del sector bancario terminó, todo está bien y podemos tomarnos vacaciones? Por supuesto que no”, dijo a Financial Times el jefe de la EBA, Andrea Enria.
Italia en riesgo
Monte dei Paschi di Sienna, el banco más antiguo de Italia y el tercero más grande en términos de capital, es uno de los que más riesgos corre: analistas de Credit Suisse estiman que necesita cerca de 3.500 millones de euros (US$ 3.800 millones).
Impacto político
Pero no es la única institución en apuros en el país. En el ámbito nacional, la banca tiene préstamos incobrables por 360.000 millones de euros (US$ 396.000 millones). “Todos los ojos estarán puestos en Italia” al darse a conocer los resultados, aseguró Bank of America.
Si los resultado son decepcionantes, podrían poner en duda la estabilidad financiera y política del país. La posibilidad de un rescate con financiamiento público enerva a los representantes de la Unión Europea, que han llamado a respetar las reglas establecidas por el bloque tras la última crisis financiera.
También incrementaría la incertidumbre política ad portas del referendo sobre una reforma constitucional que se celebrará en octubre y que marcará el destino del primer ministro Matteo Renzi.