Los equipos de rescate tras la pista del avión de AirAsia desaparecido con 162 personas a bordo recuperaron cadáveres y restos del mar frente a la costa de Borneo ayer, una noticia que provocó escenas de dolor entre los familiares que esperaban angustiados alguna novedad sobre la aeronave.
El vuelo QZ8501 de AirAsia, un Airbus A320-200, perdió contacto con los controladores aéreos tras pedir permiso para ascender y evitar las nubes justo antes de desaparecer a primera hora del domingo, durante un trayecto desde la ciudad indonesia de Surabaya a Singapur.
La Armada informó inicialmente que se habían recuperado 40 cadáveres, aunque medios luego citaron al director de la agencia de búsqueda y rescate, Fransiskus Bambang Soelistyo, diciendo que se habían sacado de las aguas sólo tres cuerpos.
La aeronave todavía no ha sido encontrada y no se mencionó la posibilidad de que hubiera sobrevivientes.
El director de AirAsia, Tony Fernandes, que ha estado en Indonesia desde que el avión desapareció, dijo que regresaría a Surabaya.
"Cualquier cosa que podamos hacer en AirAsia se hará", afirmó a través de Twitter.