En entrevista con el medio inglés The Economist, el presidente de Estados Unidos Donald Trump aseguró que no es un problema que su reforma tributaria -que busca rebajar el impuesto corporativo del actual 35% a 15%- agrave el déficit fiscal que atraviesa el país.
El mandatario dijo que parte de la reducción de gastos fiscales vendrá del proyecto de ley que reemplaza el Obamacare, un sistema de previsión en salud odiado por el Partido Republicano. La iniciativa del oficialismo no ha logrado convencer a los legisladores y una segunda versión está hoy en manos del Senado.
“Si aprobamos el proyecto de salud, ahorraremos entre US$ 400.000 millones y US$ 900.000 millones. Todo eso pasa a la reducción de impuestos”, señaló el mandatario.
“Más allá de eso”, preguntaron los editores de The Economist, “¿está bien si el plan tributario aumenta el déficit?”.
“Está bien, porque no lo aumentará por mucho tiempo. Quizá dos años más”, señaló. Más tarde agregó: “Tienes que hacer que algo entre antes de que puedas sacar algo”.
Su secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, quien también estuvo presente en la entrevista, agregó que la reducción de la carga tributaria “en el corto plazo, crea crecimiento”.
Trump también se refirió a las negociaciones del acuerdo de libre comercio de EEUU con Canadá y México: Nafta. Insistió en que su preocupación son los déficit comerciales que el país tiene con ambos vecinos. “No tiene que bajar inmediatamente a cero, no quiero crear un shock en el sistema, pero me gustaría que llegara a cero en algún momento y que algunas veces ellos estén por encima y otras veces nosotros”, señaló.
Sobre inmigración, manifestó que ““quiero que la gente entre por mérito, quiero un sistemo basado en mérito”.