Según un funcionario de la Casa Blanca, el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmará una orden para reducir los aranceles sobre la carne de vacuno, los tomates, el café y los plátanos; una medida destinada a reducir los costes de los alimentos en un momento en que el Gobierno se enfrenta a la presión de los votantes para que reduzca los precios de los productos de uso diario.
Las exenciones reducirían los aranceles comerciales sobre los productos básicos que no se pueden producir en EEUU en cantidad suficiente para satisfacer la demanda interna. El alcance exacto de la reducción arancelaria, la cantidad total de bienes incluidos y su ámbito de aplicación no quedaron claros de inmediato.
Esta medida se produce en un momento en que Trump ha centrado su atención en medidas de asequibilidad, dado que los votantes desconfían cada vez más de la economía bajo su mandato. También supone un reconocimiento tácito de que las políticas arancelarias del presidente han contribuido a la presión sobre los precios para los consumidores estadounidenses.
Un funcionario de la Casa Blanca, que solicitó el anonimato para hablar sobre la orden ejecutiva que no se ha hecho pública, afirmó que el mandatario está cumpliendo su promesa de cerrar acuerdos comerciales y ajustar los aranceles según sea necesario. La Casa Blanca no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios.
La representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, adelantó el plan este viernes por la mañana, diciendo que encaja con la estrategia más amplia de Trump de crear exenciones arancelarias para bienes y sectores clave.
“Ahora es el momento oportuno para, ya saben, publicar algunos de estos documentos que el presidente dijo que iba a publicar”, dijo Greer. “Esto es una consecuencia natural de lo que el presidente indicó, y eso es lo que está haciendo hoy”.
Trump y altos funcionarios estadounidenses han rechazado las críticas que afirman que sus políticas comerciales han incrementado el costo de vida, pero reconocen la necesidad de hacer más para reducir los altos precios que han frustrado a los votantes durante años. Trump ha elogiado con frecuencia las ventajas de los aranceles, afirmando que cree que los impuestos a las importaciones se compensan en parte con las reducciones de precios de los vendedores, lo que atenúa el impacto en los consumidores.