Una jornada negra tuvo hoy Apple en Wall Street. Claro porque el fabricante del iPhone sufrió el mayor desplome en cuatro años luego de los decepcionantes resultados correspondientes a su último trimestre fiscal.
El papel de la empresa experimentó una caída de 11,94% al cierre de las operaciones, lo que supone su mayor retroceso desde el 29 de septiembre de 2008 (17,92%).
El título de Apple se ubicó en US$ 447,28, esto es su nivel más bajo desde el 27 de enero del año pasado.
La fuerte caída trajo serias consecuencias en su valor bursátil. Es que la contracción le significó destruir unos US$ 59.000 millones, con lo cual su market cap quedó en US$ 423.000 millones, cifra muy lejana a los históricos US$ 658.000 millones que consiguió el 19 de septiembre pasado.
En todo este periodo, la destrucción de valor de la empresa fundada por Steve Jobs es equivalente a todo el PIB de Chile.
Con todo esto, la compañía redujo la ventaja que tenía con Exxon Mobile. Esta última cerró el día con una capitalización bursátil de US$ 416.000 millones.
Aunque las ganancias superaron marginalmente las expectativas, los ingresos por US$ 54.500 millones, estuvieron por debajo del promedio de las estimaciones de los analistas, que esperaban US$ 54.730 millones, de acuerdo a Thomson Reuters.
Otro dato que decepcionó al mercado fueron las ventas de los teléfonos iPhones que llegaron a 47,8 millones de unidades en su último trimestre.