A. Bounds y H. Foy en Bruselas, B. Hall en Kiev, J. Politi en Washington e I. Gridneff en Toronto
Estados Unidos está presionando a los países del G7 para que impongan aranceles de hasta 100% a India y China por la compra de petróleo ruso, en un intento por forzar a Moscú a sentarse a negociar la paz en Ucrania, según un documento visto por Financial Times.
En una videollamada este viernes, los ministros de Finanzas del G7 discutieron una propuesta estadounidense de nuevas medidas, mientras el presidente Donald Trump intensifica sus esfuerzos por mediar un acuerdo de paz.
“El G7 debería imponer de inmediato aranceles secundarios de 50%-100% a China e India por sus compras de crudo ruso”, señala un documento de posición de Washington enviado a los miembros del bloque antes de la reunión. El texto agrega que el G7 debe “apuntar a los facilitadores y beneficiarios, principalmente en China e India, para impedir que prolonguen esta guerra”.
Trump ya había instado esta semana a la UE a imponer aranceles similares, y ahora busca ampliar la presión a sus aliados del G7. “Las compras chinas e indias de petróleo ruso financian la maquinaria de guerra de Putin y prolongan la matanza sin sentido del pueblo ucraniano”, afirmó un portavoz del Departamento del Tesoro.
El mes pasado, Washington aumentó al 50% los aranceles sobre importaciones indias debido a sus adquisiciones de crudo ruso. En abril, Trump subió fuertemente los aranceles a productos chinos, pero los redujo en mayo tras la reacción negativa de los mercados.
Los europeos, sin embargo, se mostraron reticentes a aplicar sanciones secundarias a India y China, aunque abiertos a alternativas. Según un funcionario europeo informado de la llamada, recordaron que la política comercial corresponde a la Comisión Europea. La UE busca además cerrar un acuerdo comercial con Nueva Delhi en las próximas semanas.
En paralelo, el Reino Unido tratará de convencer a Trump durante su visita de Estado a Londres la próxima semana de adoptar sanciones más específicas contra empresas chinas e indias vinculadas a las importaciones de petróleo ruso, en lugar de aranceles generalizados que podrían “iniciar una guerra comercial”, dijo al FT Jonathan Powell, asesor de seguridad nacional.
Medidas contra Rusia
Washington también impulsa que los países confisquen cientos de miles de millones en activos estatales rusos congelados —en su mayoría en Bélgica—, aunque varias capitales, incluida Berlín, temen inestabilidad financiera y desafíos legales.
Entre otras medidas, EEUU propone sancionar a Rosneft, imponer mayores restricciones al transporte marítimo ruso y atacar al sistema de pagos Mir, que reemplazó a Swift para la banca rusa tras la invasión de 2022.
La Comisión Europea, por su parte, evalúa adelantar la fecha límite de 2027 para que los Estados miembros dejen de comprar petróleo y gas ruso, lo que requeriría presión de Trump sobre Hungría y Eslovaquia, que han bloqueado sanciones más duras.
El bloque europeo también debate sanciones contra China por la compra de energía rusa barata, mientras refuerza sus conversaciones con Washington para sustituir el gas natural licuado ruso por suministros estadounidenses.
Actualmente, la UE todavía importa cerca de una quinta parte de su gas desde Rusia, frente al 45% antes de la guerra.
Canadá, que ostenta la presidencia del G7, enfrenta un dilema similar. En junio, el primer ministro Mark Carney inició un acercamiento con India tras dos años de tensiones, y ha hecho gestos a Beijing en un intento de diversificar su economía más allá de Estados Unidos.