Las compañías aéreas han perdido
hasta
ahora, según cálculos de la IATA, cerca de US$ 1.700 millones debido a las restricciones impuestas por las autoridades
aeronáuticas por la nube de ceniza generada por el volcán islandés.
Así
lo informó hoy en una comparecencia ante la prensa en Berlín,
el director general de la IATA Giovanni Bisignani.
"Las
cancelaciones de vuelos le han costado hasta ahora a las
aerolíneas más de US$ 1.700 millones y, lo que es peor, la
crisis ha hecho impacto en el 29% de la aviación oficial y
afectado a 1,2 millones de pasajeros", dijo Bisignani.
"La crisis
eclipsa la del 11 de septiembre cuando el espacio
aéreo estadounidense estuvo cerrado por tres días", agregó.
Bisignani
reiteró además las críticas que ya había formulado en
París a los gobiernos europeos por el cierre del espacio aéreo que,
según él, se basó en "modelos teóricos y no en hechos concretos".
"Vuelos
de prueba de nuestros miembros han demostrado que esos
modelos eran erróneos", aseguró Bisignani.
Bisignani insistió en
que todos los miembros de la IATA le dan
prioridad a la seguridad y que han logrado hacer de la aviación la
forma más segura de viajar basando sus decisiones "en los hechos y
no en ficciones teóricas".
El director dijo que ahora se tienen
que buscar fórmulas para
mitigar los efectos económicos de la crisis generadas por el volcán
y subrayó que se tiene que plantear el tema de compensaciones
estatales.
"Soy el primero en decir que la industria no debe
depender de
subvenciones. Pero lo que ha pasado es una situación extraordinaria
a la que no hemos llegado por llevar mal nuestros negocios sino por
cosas que escapan a nuestro control", dijo Bisignani.
En ese
sentido, Bisignani recordó el precedente del 11 de
septiembre cuando el Gobierno de Estados Unidos proporcionó ayudas a
las aerolíneas.
Finalmente, el funcionario dijo que esperaba que
de la crisis se
saque la conclusión de que es necesario unificar el espacio aéreo
europeo y que surja además el convencimiento de que la aviación debe
tener un lugar más importante en la agenda política.
"El caos y
las pérdidas económicas de la semana pasada son un
claro llamado a los líderes europeos a unificar de forma urgente
el espacio aéreo europeo", dijo Bisignani.