El Índice de Precios al Consumo (IPC)
en EE.UU. subió un 0,2% en abril, un aumento debido en buena
parte al mayor incremento de los alimentos en 18 años, informó hoy
el Departamento de Trabajo.
En marzo, los precios que pagan los consumidores habían subido un
0,3%.
El aumento de abril fue más moderado de lo que esperaban los
analistas, que calculaban un 0,3%.
La moderación se debió al mantenimiento de los precios de la
energía durante abril, después de que registraran un incremento del
1,9% en marzo.
Según los datos del Departamento de Trabajo, los precios de la
gasolina cayeron en abril un 2%. No obstante, los precios
de la energía han subido un 15,9% en los últimos doce
meses.
La estabilidad en la energía sirvió para contrarrestar
parcialmente la escalada de los alimentos, que subieron un 0,9%.
Los datos oficiales indican que los precios fueron el pasado
abril un 3,9% más altos que en abril del año pasado. La
inflación subyacente se situó en el 2,3%.
La subida por debajo de lo esperado será una noticia acogida con
satisfacción por la Reserva Federal, que desde el pasado septiembre
ha recortado los tipos de interés en siete ocasiones para tratar de
estimular la economía.
La Reserva, sin embargo, ha apuntado que el ciclo de recortes
puede haber llegado a su final ante los temores de que pudieran
alimentar la inflación.
Se espera que el Comité de Mercado Abierto de la Reserva mantenga
invariables los tipos de interés en su próxima reunión, entre el 24
y el 26 de junio.