Internacional
Las opciones de Grecia ante la negociación de la deuda: se viene un default “duro” o “suave”
Atenas debe lograr un acuerdo con los inversionistas si quiere acceder a un préstamo de la UE.
Por: Equipo DF
Publicado: Miércoles 25 de enero de 2012 a las 05:00 hrs.
Por Marco Fajardo
Grecia lleva cuatro años en recesión, sufre un desempleo récord de 18% y está a la espera de un segundo paquete de rescate de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional. A esta altura, por eso, ya casi nadie en Europa duda de que entrará en algún tipo de default durante este año, empujada por una deuda de 200.000 millones de euros. La cuestión es de qué clase de default será.
Actualmente el país negocia una reducción de la deuda con los acreedores privados, representados por Charles Dallara, director ejecutivo del Instituto de Finanzas Internacionales, negociaciones que hasta el momento no han llegado a buen puerto. Dallara se reunirá hoy con los acreedores en París para ver “qué piensan en la actualidad”.
Según Reuters, hay dos opciones de default: “suave”, es decir, mediante un acuerdo que implique una reducción sustancial de la deuda, o “duro”, en caso de no haber acuerdo y con una suspensión total de pagos.
La UE quiere un “perdonazo” por al menos 100.000 millones de euros, equivalentes a un recorte de deuda de 50% que ya fue acordado con los acreedores en la cumbre del bloque en octubre.
La pelea gira en torno a los intereses que pagarán los nuevos bonos griegos, en vista de los rendimientos exorbitantes que cancela Atenas en la actualidad (ayer los bonos helenos a 10 años cerraron con rendimientos de 33%). El jefe de la eurozona, Jean-Claude Juncker, afirmó en su momento que deben ser inferiores al 4%. Además el objetivo del acuerdo es reducir la proporción deuda/PIB del actual 140% al 120% en 2020, una relación considerada más “sostenible”.
Este acuerdo es una condición para conceder el segundo paquete de ayuda. Un factor de presión es la cumbre de la UE de fin de mes. Otra, los vencimientos por 14.000 millones de euros que enfrenta Atenas el 20 de marzo.
¿Defaults y defaults?
1 Las calificadoras Standard and Poor’s (S&P), Fitch y Moody’s rebajaron a Grecia en julio cuando se presentó el plan de rebaja de deuda.
Las dos primeras han dicho que un cambio de deuda que implique pérdidas para los acreedores será considerado un default “suave”.
¿Qué viene después?
2 S&P señaló en julio que en caso de una reestructuración de deuda rebajará los bonos afectados a “D”, su peor nota e indicativa de “default”.
S&P y Moody’s además señalaron que una vez que concluya la reestructuración reevaluarán el rating de Grecia en virtud de su deuda, lo que probablemente implica que subirán su calificación. Y los nuevos bonos probablemente tendrán una mejor calificación que los actuales.
En caso de un default total, probablemente se considere que los políticos han perdido el control del euro, y los mercados apuntarán a otros países débiles de la eurozona, como Italia, España y Portugal.
¿Y los CDS?
3 Otra cuestión clave es qué sucederá con los seguros contra impagos de deuda (CDS), que entran en vigor en caso de un default. ¿Se activarán en caso de uno “suave”?
La última palabra la tendrá la Asociación Internacional de Swaps y Derivados (ISDA), que agrupa entre otros a 825 bancos, empresas energéticas, aseguradoras y otros participantes del mercado de derivados de 58 países y cinco continentes.
Según los últimos datos de la consultora DTCC, los CDS de la deuda griega suman un total de US$ 70.800 millones brutos y US$ 3.200 millones netos. Se estima que si los inversionistas son obligados a sufrir pérdidas, incluso en el marco de un acuerdo, se activarían los pagos de los CDS.