El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó hoy
que la economía mundial ha vuelto "del borde del precipicio".
En un discurso ante la 65 Asamblea de Naciones Unidas, para
exponer sus prioridades en política exterior, el presidente estadounidense
declaró: "no podemos descansar hasta que las semillas del progreso crezcan
y den una prosperidad más amplia, para los estadounidenses y toda la gente en
el mundo".
El mensaje del mandatario ante Naciones Unidas también abarcó
otras materias, como el conflicto en Medio Oriente y las relaciones diplomáticas
con Irán, entre otros temas.
En lo relativo al conflicto paestino-israelí, el presidente Obama
pidió una extensión de la moratoria relativa a la construcción de nuevos
asentamientos israelíes en Cisjordania, que expira el próximo 29 de septiembre.
En su discurso ante la Asamblea General de la ONU, en el que
lanzó un emotivo llamamiento a israelíes y palestinos a aprovechar la
oportunidad de sus conversaciones directas para llegar finalmente a un acuerdo
de paz, Obama explicó que esa moratoria "ha creado una diferencia sobre el
terreno y ha mejorado la atmósfera en las negociaciones".
Obama lanzó también un llamamiento a los Estados árabes a
prestar una mayor asistencia a los palestinos para que puedan crear las
instituciones de su futuro Estado, y para que no intenten socavar la seguridad
de Israel.
El Presidente se refirió a la situación de Irán, mencionado que "la puerta de la
diplomacia sigue abierta para Irán" si ese país acepta cumplir sus
compromisos internacionales y renunciar al enriquecimiento de uranio.
"El Gobierno iraní debe demostrar un compromiso claro y
creíble, y confirmar a la gente las intenciones pacíficas de su programa
nuclear", insistió el presidente estadounidense.