Las ventas de autos nuevos en
Estados Unidos se desplomaron un 38% durante las tres primeras
semanas de febrero, advirtió hoy la empresa de estudios de mercado J.D. Power & Associates,
aunque añadió que el ciclo negativo puede estar cerca de su fin.
Los resultados están en línea con las previsiones de los
principales fabricantes de automóviles en Estados Unidos, que ya
habían advertido que el clima económico en el país y las
dificultades crediticias se reflejarían de forma negativa en los
resultados de los seis primeros meses de 2009.
La firma intentó introducir un cierto optimismo en el sector, al
señalar que la baja de las ventas podría estabilizarse en los
próximos meses.
Jeff Schuster, director ejecutivo de previsiones de J.D. Power,
dijo que "la crisis en el mercado automotor sigue empeorando",
pero indicó que creen que está "cerca del fondo del ciclo".
J.D. Power también advirtió que la incertidumbre en el sector
todavía se mantiene con respecto a la segunda mitad del año, cuando
la industria espera que los seis últimos meses de 2009 marquen el
inicio de la recuperación.
"Nuestras expectativas es que febrero y marzo serán el punto
bajo. Un elevado grado de incertidumbre y riesgo se mantiene para la
segunda mitad del 2009 si los diversos factores que están impactando
actualmente las ventas de automóviles no mejoran o se estabilizan",
señaló la firma.
Los analistas de la empresa ahora esperan que este año termine en
Estados Unidos con unas ventas de vehículos nuevos de 10.400.000
unidades, un millón menos que en su última previsión.
Las ventas de febrero previstas por J.D. Powers son de 580.000
unidades, un 34% menos que en el mismo período de 2008. De
mantenerse ese ritmo de ventas durante el resto del año, 2009
cerraría con la venta de 9,1 millones de unidades.
Los principales fabricantes de automóviles en Estados Unidos
tienen previsto dar a conocer las cifras de ventas en febrero el
próximo 3 de marzo.