El Banco Central Europeo (BCE) replica el mensaje que dio
anoche la Reserva
Federal al anunciar que cree que "la recesión global ha
tocado fondo".
Además, añade que en la zona del euro "el ritmo de
contracción se ralentiza claramente", aunque advierte que "la
actividad económica será débil en lo que queda de año".
En su boletín mensual de agosto, publicado hoy, el organismo
comunitario destaca además que "la significativa política de estímulo en
las principales áreas económicas debe apoyar el crecimiento global, incluida la
zona del euro".
La semana pasada el organismo que preside Jean-Claude
Trichet mantuvo los tipos de interés en el 1%, su mínimo histórico, con el fin
de apoyar el crecimiento de los países de la zona euro. Así, hoy ha indicado
que "el año que viene, tras una fase de estabilización, se espera una
recuperación gradual con tasas de crecimiento trimestrales positivas".
Aunque el BCE tiene una visión más optimista de la economía
que en otras ocasiones, advierte de una incertidumbre aún "elevada"