El dólar volvió al alza del largo fin de semana dieciochero, mientras las últimas señales de la Reserva Federal (Fed) y los comentarios de sus miembros siguieron dando qué hablar a los participantes del mercado, algo más cautos sobre los recortes de tasas de interés que se avecinan.
La paridad dólar-peso cerró a $ 956,2 este lunes, lo que significa un avance de $ 4,56 si se compara con el cierre del miércoles, según los precios de Bloomberg.
El dollar index caía 0,3%, pero después de subir por tres sesiones consecutivas junto con los rendimientos del Tesoro, mientras que el futuro de cobre cotizado en Londres subió 0,2% para recuperar la marca de US$ 10 mil por tonelada (US$ 4,54 por libra).
Cuánto recortar
El tipo de cambio local subió el miércoles, tras recibir el comunicado de tasas de la Fed en horas de baja liquidez, previo al fin de semana largo de Fiestas Patrias en Chile. La Fed retomó la política expansiva con un recorte de 25 puntos base (pb), como se esperaba, pero las expectativas de nuevos recortes se han enfriado.
El presidente del banco central estadounidense, Jerome Powell, calificó la decisión como un "recorte de gestión de riesgos", tomando en cuenta que las proyecciones oficiales de crecimiento se revisaron al alza, lo que subraya la buena salud de la economía estadounidense, más allá de las alertas sobre la situación del empleo.
Las palabras de Powell han desanimado un poco a los entusiastas de la relajación monetaria. El rendimiento del Tesoro a dos años -sensible a lo que se espera de la Fed- acumula un alza de 10 pb desde el cierre del pasado martes, y en lugar de cinco, el mercado ahora da por descontados cuatro recortes de tasas en los próximos 12 meses, según los precios del mercado derivado.
Los costos de la deuda estadounidense subieron un poco más este lunes, luego que el presidente de la Fed de St. Louis, Alberto Musalem, calificara el último recorte como "una medida preventiva destinada a apoyar al mercado laboral en pleno empleo y a evitar un mayor debilitamiento", y advirtiera que "hay un margen limitado para seguir relajando la política sin que esta se vuelva excesivamente acomodaticia".
No fue el único que puso paños fríos a las expectativas de relajación. Beth Hammack de la Fed de Cleveland manifestó: "Estamos a poca distancia de la tasa neutral, y me preocupa que si eliminamos esa restricción de la economía, las cosas puedan empezar a recalentarse de nuevo".
Por otro lado, sin sorpresas y tras votar este mes por una reducción de 50 pb, Stephen Miran ha defendido la moción de bajar las tasas agresivamente. "Mantener las tasas de interés de corto plazo en torno a dos puntos porcentuales demasiado elevadas entraña el riesgo de despidos innecesarios y un aumento del desempleo", argumentó el recientemente nombrado gobernador por Donald Trump y único disidente de la última reunión de política.