Una vez más los principales indicadores de las bolsas
europeas sea lienan con el pesimismo que reina en Wall Street que los llevan a
cerrar con fuertes bajas de más de 2%.
Una vez más fue el parqué neoyorquino la referencia tras la
reunión de la Reserva Federal que decidió mantener las tasas de interés y que al
anunciar nuevas medidas de estímulo confirmaron los temores a un freno en la
recuperación.
Por su parte en el viejo continente la mala noticia la puso
el Banco de Inglaterra que rebajó su previsión de crecimiento para la economía
británica en al 2,5%, frente al 3,4% apuntado en mayo, y admitió que el
panorama económico es "más débil que hace tres meses".
En ese contexto, la bolsa española bajó 3,21% llegando a los
10.374,80 puntos, mientras que el DAX 30 de Frankfurt cayó 2,10% hasta las 6.154,07
unidades.
Por su parte, el FTSE de Londres retrocedió 2,44%, terminando
en 5.245,21 unidades y el principal índice de la bolsa de París el CAC-40,
perdió un 2,74% para terminar en 3.628,29 enteros.