Por segunda sesión consecutiva los precios internacionales del petróleo cerraron con bajas, esta vez presionados por los temores frente a la recuperación de la economía estadounidense, una de las principales consumidoras de la materia prima a nivel global.
En este contexto,
el Petróleo Intermedio de Texas (WTI), que sirve de
referencia para los precios que aplica la ENAP en Chile, cayó US$ 2,13, llegando a los US$ 78,09. Por su parte, el Brent, de
referencia en Europa, bajó US$ 2,60, lo que lo llevó a los US$ 82,40.
Ni siquiera el informe de los inventarios en Estados Unidos, que bajaron más de lo esperado la semana pasada, logró impulsar el valor del también llamado oro negro.
El Departamento de Energía de los EE.UU. informó hoy de que
las reservas de petróleo del país bajaron en 3 millones de barriles la semana
pasada y quedaron en 355.000 millones de barriles, una cifra, no obstante, por
encima del promedio de barriles para esta época y un 0,8% superior a
la de hace un año.
La agencia informó además de que durante la semana pasada
las refinerías petroleras en Estados Unidos operaron al 88,1% de su
capacidad y que el total de existencias de crudo y productos refinados en EE.UU.,
incluida la Reserva Estratégica, se situó en 1.851,6 millones de barriles.
Sin embargo, estos datos no lograron convencer a los
inversionistas que se dejaron llevar por el pesimismo de los datos oficiales
difundidos hoy mismo, que reflejan un inesperado aumento del 18,8% en
el déficit comercial de EE.UU. en junio, debido en parte a un descenso del 1,3% en las exportaciones, lo que hizo dudar de una recuperación de la
demanda de crudo del mayor consumidor de energía del mundo.
Otros datos divulgados en China, relativos a producción
industrial, ventas minoristas e inversiones en activos fijos, relativos a
julio, apuntaron a que la actividad económica en ese país ha perdido algo de
vigor, lo que también afectó negativamente al Brent.
Ese conjunto de datos económicos alimentaron la inquietud
generada el martes entre los inversionistas por el informe de la Reserva Federal
estadounidense, que prevé a corto plazo un ritmo de recuperación de la economía
del país más modesto de lo que calculaba con anterioridad.