En una volátil jornada, reflejo de la situación en los
mercados internacionales, el dólar anotó un fuerte retroceso, prolongando la
tendencia de ayer.
Al término de las operaciones, la divisa estadounidense se
ubicó en puntas de $ 636,20 comprador y $ 636,70 vendedor, lo que implica una
caída de $ 6,1.
La jornada comenzó con un alza de $ 1,2 que lo llevó a
probar un techo de $ 644 en la
sesión. Cabe señalar que los operadores habían previsto un
techo de $ 650 esta semana como nivel de resistencia.
A partir de la apertura la divisa comenzó a zigzaguear sin
rumbo definido hasta que, a eso del medio día, cayó abruptamente hasta los $
634, el nivel más bajo de la sesión.
Las operaciones cambiarias se enmarcaron en un clima
altamente volátil en los mercados extranjeros. Wall Street había iniciado las
actividades con un incremento de 1%, el que se desvaneció en menos de 30
minutos, dando paso a los números rojos.
Paralelamente, hoy el cobre anotó un nuevo retroceso en medio de las fuertes bajas que ha anotado el mercado de materias primas. En Londres el commodity bajó 0,03% a un nuevo mínimo desde julio de 2005.