Jugársela por el alza del FTSE 100:
El índice británico ha demostrado ser más defensivo (y eso importa si sigue la ola de ventas) y resistiría mejor un mayor deterioro de China. “Estamos subponderando bancos y preferimos los relativamente más seguros del Reino Unido como HSBC”, añaden.
Fijarse en los dividendos:
La baja inflación y rendimientos cercanos a cero en bonos dejan pocas opciones para una rentabilidad real decente. Por ello, sugieren un cambio gradual hacia acciones que den un dividendo razonable y donde éste se haya venido incrementando en los últimos años.
Baratas, pero de alta calidad:
Sugieren seguir una cartera diversificada de acciones que estén baratas, pero que tengan alta rentabilidad e impulso. "Una estrategia de valor simple, combinada con rentabilidad y momentum, superó el retorno del STOXX 600 en 13% desde el 2000".
Invertir en acciones suizas:
"Nuestros estrategas piensan que el Banco Central Suizo va a elevar el piso de 1,20 francos por euro a 1,25 en el próximo trimestre. Para beneficiarse de esta medida, seleccionamos las acciones mejor situadas para beneficiarse de la depreciación del franco suizo: Clariant, Roche, Swiss Re y ABB".