Por tercera sesión consecutiva Wall Street finalizó su día en el terreno de los números rojos, en medio de los temores que han comenzado a invadir a los mercados respecto a la recuperación de Estados Unidos y del mundo.
Hoy fue la cifra de desempleo semanal, que subió inesperadamente en su última
lectura, la que inyectó de pesimismo a la plaza neoyorquina, que de paso contagió a otras plazas internacionales.
En este contexto, el
promedio de
industriales Dow Jones cayó 0,57% a 10.319,95
puntos, mientras que el S&P 500 anotó un retroceso de 0,54% a
1.083,61
unidades. En el mercado Nasdaq, las acciones tecnológicas registraron un
fuerte retroceso de 0,83% a 2.190,27 puntos.
Las solicitudes de subsidio por desempleo subieron en
2.000 unidades hasta las 484.000 peticiones -su nivel más alto en seis
meses- la semana pasada, dato que se sumó al anuncio de la Reserva Federal, que este martes
informó nuevas medidas para estimular a la economía estadounidense.
Estrategia
de la entidad emisora que fue recibida por el mercado como la
confirmación de una nueva desaceleración en Estados Unidos, lo que hace
temer por la salud de la economía global.
Ayer además se
conoció el déficit comercial de Estados Unidos, que creció un
18,8% en junio y llegó a US$ 49.900 millones, el nivel más alto de los
últimos
20 meses y por sobre lo esperado, lo que generó mayor incertidumbre
entre los operadores que optaron en su mayoría por las ventas.