Detrás de la relativa estabilidad que ha visto el precio del dólar, el mercado cambiario chileno vive un periodo ajetreado por los cierres de posiciones de agentes extranjeros frente a las elecciones presidenciales y legislativas del 16 de noviembre.
El segmento interbancario al contado (spot) está transando unos US$ 2.700 millones diarios, si se toma como referencia una media de las últimas 50 sesiones, muy por sobre los US$ 1.900 millones promedio de 24 meses.
Estos son máximos en la serie del Banco Central, que comienza en 2022. Por otro lado, un registro de la Bolsa Electrónica (BEC) muestra que el flujo interbancario de dólar-peso alcanza su mayor nivel desde mayo de 2023.
"La cercanía de las elecciones ciertamente ha impulsado la actividad. Históricamente, los volúmenes tienden a aumentar las semanas previas a medida que se acercan comicios relevantes, debido a la mayor incertidumbre, alcanzando su peak una o dos semanas antes de la votación y nuevamente previo a una eventual segunda vuelta. Por ende, es razonable esperar que este fenómeno continúe intensificándose las próximas semanas", dijo a Señal DF el FX trader de LarrainVial Corredora de Bolsa, Felipe Bittner.
A esto agregó que durante 2025 se ha visto un auge de operaciones en el mercado de capitales, por un aumento de flujos entre inversionistas locales y extranjeros. De hecho, destacó que septiembre registró un récord de montos intermediados por las corredoras de bolsa.
Similar fue el diagnóstico de Sebastián Rosselot, el customer experience de la plataforma de derivados financieros Xymmetry by NetGO. "Si algún agente del mercado tenía posiciones abiertas por cualquier motivo, ahora las está cerrando, y eso explica por qué hay tanta transacción. Ya estamos en la recta final, y nadie quiere llegar a las elecciones con una posición abierta, porque es muy riesgoso. Las elecciones últimamente han estado alineadas con las expectativas, pero siempre puede haber sorpresas. Yo, que llevo muchos años en el sistema, recomiendo estar absolutamente cerrado: ni comprado ni vendido".
Influencia extranjera
Los derivados de tipo de cambio cuentan una parte importante de la historia, ya que los extranjeros, por lejos los agentes más relevantes de este segmento, han estado incrementando sus transacciones. En concreto, los no residentes están operando aproximadamente US$ 3.900 millones diarios, frente a los US$ 3.100 millones que promedia el último par de años.
"Es natural que el segmento interbancario y el de no residentes se muevan de manera correlacionada, dado que estos últimos operan directamente contra la banca local", apuntó Bittner.
El FX trader de la mesa de dinero Sales & Trading del Banco Bci, Jorge Concha, explicó que "los inversionistas extranjeros, por su sofisticación y objetivos, utilizan predominantemente el mercado de derivados (principalmente forwards) para construir y desarmar sus posiciones especulativas o de cobertura cambiaria. Estos instrumentos les permiten operar con apalancamiento y sin necesidad de mover el monto total de la operación. En consecuencia, el aumento de la actividad de los no residentes se refleja de manera directa y amplificada en las estadísticas del mercado de derivados".
La proximidad de las elecciones -que el operador califica como "un factor crucial"- se suma a las operaciones de carry trade por diferenciales de tasas de interés, el rally del cobre, la política comercial internacional y las guerras en Europa del Este y Medio Oriente. Todos son factores que han contribuido al auge de transacciones de moneda extranjera, sostuvo.
"Esta suma de variables obliga a los agentes económicos a gestionar su riesgo cambiario de forma mucho más activa, considerando la alta volatilidad del tipo de cambio que fluctuó entre un mínimo de $ 916 y un máximo de $ 1.018 en lo que va del año. Esto se traduce directamente en un mayor número de operaciones de compra y venta en los mercados spot y de derivados", afirmó Concha.
Desde LarrainVial, Bittner coincidió en que "el inicio del ciclo de relajación monetaria de la Reserva Federal y las tensiones comerciales entre ese país y China han elevado la volatilidad global, impactando también al mercado chileno".
En cuanto a los precios del dólar, puso el énfasis en que recientemente se han mantenido en un rango relativamente acotado entre $ 948 y $ 970, con movimientos más rápidos y volátiles que "generan oportunidades para importadores, exportadores y operadores especulativos".
Rosselot, de Xymmetry, sostuvo que la situación preelectoral se combina con la tramitación del Presupuesto 2026, donde si bien el ministro de Hacienda, Nicolás Grau, prácticamente no tiene alternativa distinta a reducir el déficit fiscal, el hecho de que haya llegado tan sorpresivamente al cargo tras la renuncia de Mario Marcel hace que el proceso esté cargado de una cierta incertidumbre.
Choque de fuerzas
La situación que se advierte al netear los volúmenes transados según compra o venta también es inusual. Si se acumulan los flujos de 2025, los bancos chilenos son ligeramente vendedores de moneda extranjera en el mercado spot, contrario al sesgo comprador de los últimos años.
De acuerdo con Rosselot, esto refleja el "choque de fuerzas" por el afán de cerrar posiciones y quedarse con dólares en mano frente a la contienda electoral, a pesar de que los drivers internacionales -como el precio del cobre y las tasas de interés estadounidenses- han estado moviéndose en direcciones que suelen favorecer al peso chileno.
En cuanto a los montos vigentes de los derivados de moneda extranjera (el stock de posiciones en juego), los no residentes han moderado sólo un poco su posición sobre el peso, que el miércoles se cifró en unos US$ 3.600 millones netos contra la moneda local, según los datos del Central.
Bittner estimó que "si bien se ha observado un desarme de posiciones de inversionistas extranjeros a lo largo del año, en el último mes estas se han estabilizado -pese a la alta volatilidad- sugiriendo flujos reales de capitales, pero sin una dirección clara".