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REGÍSTRATE AQUÍPor: Equipo DF
Publicado: Martes 8 de julio de 2014 a las 05:00 hrs.
Si el pasado sirve como guía, el encuentro de mañana entre Holanda y Argentina en el Arena Corinthians de Sao Paulo por las semifinales de la Copa del Mundo debería ser memorable. En sus cuatro partidos mundialistas, ambos países han producido un fútbol inolvidable, lo que deja a Lionel Messi y a Robin van Persie con una tremenda responsabilidad.
El gol de la victoria de Dennis Bergkamp en los cuartos de final del torneo de 1998 fue un momento individual sobresaliente y es ampliamente considerada una de las definiciones más hábiles en un partido del Mundial.
La actuación de Holanda en su primer partido ante los argentinos, en Alemania Occidental en 1974, es visto por algunos como el punto máximo de la habilidad colectiva. Liderados por dos goles de Johan Cruyff, deslumbraron con sus pases y movimientos en una famosa victoria 4-0. Cuatro años después, ambas selecciones se encontraron en la final del Mundial que culminó con el triunfo del anfitrión Argentina 3-1 en tiempo extra en una cancha cubierta de papeles. La figura de los argentinos en aquella final fue el delantero Mario Kempes, quien anotó dos goles. El encuentro más reciente será el más fácil de olvidar. Hace ocho años, ambas selecciones empataron 0-0. (Reuters)
Para representantes del mundo empresarial, la falta de certeza jurídica y las propuestas impulsadas en el Parlamento son factores tras el débil desempeño del mercado laboral.